El
pasado hace parte de cada uno de nosotros y es clave conocerlo para poder
aceptarlo y sanar muchas heridas que ha podido dejar consigo. Sin embargo, hay
quienes deciden anclarse en este pasado o en esta historia, lo cual les impide
avanzar, conocer y aceptar el presente.
La decisión
está en sus manos, no se trata de ignorar el pasado sino de reconocerlo y mirar
hacia adelante, trabajando con lo que se tiene y mejorando en lo que se quiere.